Faso Es Salud

jueves, 3 de marzo de 2011

Porqué "El hada de las Tucas"?

Por si alguna curiosa mente allá afuera se preguntaba, este simpático nombre se refiere a algo así como una tradición adoptada por uno de los grupos de amigos que mi novio y yo tenemos en común.

Antítesis del no tan simpático Duende Robatucas, esta curiosa criatura nace cuando estos chicos, en un acto de solidaridad hacia sus pares, regalaban tucas sin hacerse notar. Imaginensé abrir el cajón de los cubiertos, el botiquín del baño, mirar adentro de una zapatilla o abajo de la almohada y ahí, con ojos de recién nacida y rogando por un poco de calor, una tuca que no les pertenece y nunca antes vieron en la vida.
Miran para un lado, después para el otro, no hay nadie. Le preguntan (como si fuera a responderles), con un poco de vergüenza, "De donde viniste?" y ésta, en lugar de hablar de una cigüeña que vino de París, contesta algo como que la trajo El hada de las Tucas.
Se quedarán pensando, asumo, que es hora de dejar de fumar por un par de horas: una tuca jamás nos hablaría.
Pero en lugar de eso, lo que sé que van a hacer, es responder al llamado de calor con el encendedor o fósforo más cercano y colgarse pensando en que cierta adorable criatura les anda dejando regalos altamente flamables.

Cuando somos chicos un tal Ratón Perez, en otros países "El hada de los Dientes", nos cambia dinero por nuestros dientes caídos y somos felices. En algún momento de la vida, un compañerito de jardín mala onda o una tía amargada, nos pone un poco de luz sobre el asunto: el Ratón Perez son nuestros padres.
Pero pocos de nosotros tiene la suerte de que, de más grandes, papá o mamá dejen tucas por la casa. Vendrán tiempos mejores para las generaciones del futuro.
Asíque si tenés un amigo, y tenés una tuca, ya sabés qué buena acción podés hacer para irte a dormir más tranquilo (y no hablo de fumarte uno). Andá a visitarlo y dejale una donde sepas que va a encontrarla, que lo bueno vuelve y te deja más de una satisfacción.

Este blog desde su título aporta una humilde excusa para ser solidarios. Quién no quiso ser criatura fantástica por un día?

No hay comentarios:

Publicar un comentario